¿Cómo cuidar una herida quirúrgica?

Evita infecciones y cómo tratarlas, siguiendo estas sencillas recomendaciones.

Cuando nos realizan una cirugía nos preocupa los cuidados que se deben tener después de este proceso y sobre la manera de cuidar la herida para que no se infecte, además de reducir las cicatrices. Por eso, la Clínica Universidad de La Sabana, desde su Programa de Prevención y Cuidado de la Piel, te explica los cuidados de la herida quirúrgica en casa, por parte del jefe de Enfermería y líder del programa, Osvaldo Crespo Rodríguez.

Según la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, en su artículo “Cuidado de heridas quirúrgicas abiertas”, una herida quirúrgica es “una incisión, un corte a través de la piel que se hace durante una cirugía. Algunas incisiones son pequeñas y otras largas. El tamaño de la incisión dependerá del tipo de cirugía a la que se ha sometido”.

Para evitar infecciones y mejorar el proceso de cicatrización, ten en cuenta las siguientes recomendaciones:

• Mantén la herida cubierta hasta cuando tu médico especialista retire la cura.

• Evita humedecer el área de la cirugía. Sí te encuentras en el baño, cubre la herida o la cura.

• Si la herida esta descubierta, aplica abundante agua y jabón.

• No consumas alimentos grasos o que consideres irritantes; consume abundantes proteínas, frutas y verduras.

• Evita realizar esfuerzos los días posteriores a la intervención quirúrgica.

• Ten en cuenta los signos de infección: Rubor alrededor de la herida, calor, dolor o salida de secreción. Sí presentas estos síntomas, acude al servicio de urgencias de la institución donde la operación fue practicada.

• Recuerda acudir de forma puntual a los controles médicos.

• En caso de tener una complicación que implique una curación, recuerda que esta debe realizarla una persona con conocimiento, como un enfermero profesional, o debes asistir a un servicio médico.

Recuerda que cada persona y cada procedimiento es diferente, y depende de muchos factores asociados a tu salud. Por esto, en caso de tener dudas, consulte con tu médico especialista o con la enfermera del servicio.