Sí es posible tener una alimentación equilibrada en Navidad

Una de las claves es no desequilibrar la alimentación. Se debe comer con moderación, no se pueden comer todos los días dulces, natillas, buñuelos, mantecadas, etc.

La nutricionista y dietista de la Clínica Universidad de La Sabana, Mónica Avellaneda, explica cómo cuidar la alimentación en las fiestas navideñas.

Los días de diciembre son para compartir en familia y celebrar. Una de las características de estas festividades es la abundancia de platos especiales. Cuidar nuestra salud no implica dejar de disfrutar estas comidas, sino hacerlo con moderación.

Durante las festividades se puede ser flexible con los horarios de las comidas, pero lo más importante es no saltarse ninguna. No desayunar es un error. Se recomienda realizar cinco comidas diarias, comer despacio y masticar bien los alimentos. Si tenemos programada una comida abundante, es preferible consumir en los otros tiempos de comida preparaciones suaves o ligeras para compensar la ingesta. Se debe evitar llegar con hambre, de esta manera es más fácil contralar las cantidades y tipos de preparaciones a consumir.

Una de las claves es no desequilibrar la alimentación. Se debe comer con moderación, no se pueden comer todos los días dulces, natillas, buñuelos, mantecadas, etc.; es mejor dejar la ingesta de este tipo de preparaciones para las fechas establecidas y los otros días del mes comer de forma equilibrada. También debemos cuidar la cantidad de alimentos que ingerimos, es mejor comer de todo, pero sin abusar. Emplear platos de postre es una manera de limitar la cantidad que se sirve; además, es importante no repetir.

Por otra parte, no se debe dejar de lado el ejercicio. La actividad física ayuda a mejorar la digestión e incrementa el gasto calórico, lo que contribuye a controlar el peso. Otras recomendaciones como evitar ofrecer y consumir demasiados aperitivos y snacks antes de los platos principales, cocinar sólo la cantidad que se va a comer el día de la celebración –lo cual evita que estas preparaciones sigan presentes en las mesas durante los siguientes días- e incrementar el consumo de fibra, lo cual se logra con la ingesta de productos integrales, fruta entera y verduras frescas, porque facilitan la digestión y proporcionan sensación de saciedad, pueden ayudar a controlar la cantidad de alimentos a consumir.

Los niños, al igual que en los adultos, deben controlar las cantidades de todos los alimentos y mantener una adecuada hidratación. Principalmente, hay que controlar el consumo de azúcar; por lo tanto, hay que suministrar los dulces o postres de manera racionada.

En caso de realizar viajes nacionales o internacionales, recuerda comprar los alimentos en lugares certificados, con permiso para su funcionamiento, evitar el consumo de alimentos crudos, o que no estén debidamente lavados y desinfectados, y consumir agua potable. Se debe evaluar la tolerancia a los nuevos alimentos. Si se presenta algún síntoma que pueda indicar que eres alérgico, elimina la ingesta de dicho alimento.